miércoles, agosto 16, 2006


Y cuando la lágrima cae
haces tú que se derrame con más fuerza,
con más ímpetu,
pero consigues que arrastre más dolor.
Porque me cansé de palabras bonitas,
no necesito que acaricien mis oídos
sino que escupan verdades
y logren abrazar mi alma.

2 comentarios:

Casshern25 dijo...

eso de pedir que "te escupan verdades" tiene varios riesgos, el primero que no te guste lo que escuches, pero sobretodo que te pidan lo mismo... "escupeme ahora tu" y claro abrir tu alma es más jodido que escuchar las otras abiertas y más cuando por experiencias pasadas te dañaron el alma por abrirla demasiado.

Frozen dijo...

Las verdades escupidas no siempre son agradables, pero siempre son verdades, tanto como las verdades acariciadas.