Enhorabuena, has vuelto a cumplir tu misión, estoy segura: naciste para despistarme.
Pero me basto yo solita para enredarme en los hilos de esta realidad.
Quiero las cosas claras, y tu eres demasiado espeso.
Las nubes viajan por el mundo arrastradas por el viento, en mi caso, a veces me siento arrastrada por las circunstancias; pero esto sólo hace que descubra miles de cosas que aún me quedaban por descubrir.
2 comentarios:
Curiosa simbiosis y mas allá un susurro se supone, un viento nuevo surge levemente, suave, limpio, casi imperceptible, que a la vida poco a poco nos devuelve.
Desde mi alma farolera,con la esperanza del desenrredo, me despido de la "sobrada" nubecilla.
Qué razón tienes.
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