martes, diciembre 09, 2008

Enhorabuena, has vuelto a cumplir tu misión, estoy segura: naciste para despistarme.
Pero me basto yo solita para enredarme en los hilos de esta realidad.
Quiero las cosas claras, y tu eres demasiado espeso.

2 comentarios:

Condevolney dijo...

Curiosa simbiosis y mas allá un susurro se supone, un viento nuevo surge levemente, suave, limpio, casi imperceptible, que a la vida poco a poco nos devuelve.

Desde mi alma farolera,con la esperanza del desenrredo, me despido de la "sobrada" nubecilla.

Afrodita dijo...

Qué razón tienes.